sábado, 27 de abril de 2024

Feria del Libro de Alcalá de Henares


 



El próximo sábado 4 de mayo firmo mi nuevo poemario, Sabiduría de los límites (UAH, 2023), en la Feria del libro de Alcalá de Henares. 

Os esperamos.



sábado, 6 de abril de 2024

Apoyo al colectivo "Rebelión científica"

En el centro, el filósofo, poeta y ensayista Jorge Riechmann

 


Copio del blog de Jorge Riechmann:


"Jornada en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS) en apoyo al colectivo Rebelión Científica y a lxs demás activistas (algunxs pertenecientes a Ecologistas en Acción) que han sido imputados y están pendientes de juicio por la protesta no violenta en la Puerta de los Leones del Congreso de los Diputados, el 6 de abril de 2022, para denunciar la inacción climática de los Gobiernos. Además de esas 15 personas, en las últimas semanas de 2023 casi una treintena de miembros de Futuro Vegetal han sido detenidos bajo la acusación de formar parte de una organización criminal (y después puestos en libertad, pero con cargos."


Esta mañana ha habido dos recitales poéticos en apoyo a dicho colectivo. A las 10:00 y a las 12:00. 


Mi contribución poética a la causa


Las jornadas de protesta y reivindicación se continuarán esta tarde a partir de las 17:00, también el museo Reina Sofía. 

Este es el manifiesto que se ha leído hace unos horas:


Manifiesto SE AGOTA EL TIEMPO

Se agota el tiempo, sí, mientras nuestras sociedades naufragan… Valga un solo ejemplo impresionante de este comienzo de 2024, que retrata el nihilismo dominante en toda su crudeza: en Groenlandia, cuyos glaciares se deshacen por el calentamiento global, un empresario ha tenido la idea de vender hielo de estos glaciares a los bares de cócteles más exclusivos de los Emiratos Árabes Unidos, ese petroestado que contribuye como pocos a realimentar la catástrofe climática.

Éste es el mundo demencial donde millones de personas tratan de impulsar un cambio de rumbo mediante múltiples formas de protesta ecologista y climática (protesta acompañada casi siempre de propuesta); pero también el mundo donde estas acciones se enfrentan a una represión creciente en muchos países, incluido el nuestro.

En la primavera de 2022, durante una semana larga de movilizaciones impulsadas a nivel internacional por Rebelión Científica, se organizaron diversas acciones reivindicativas. También en Madrid, donde participaron un centenar de personas vinculadas a varios colectivos ecologistas. La protesta, el 6 de abril de 2022, hace exactamente dos años, consistió en acercarse estos grupos de activistas sin ser descubiertos al Congreso de los Diputados y verter un líquido biodegradable de color rojizo (“sangre falsa”), que se limpia fácilmente, en las escaleras del Congreso. La acción quería poner en el centro de atención el último informe del IPCC, y mandar un mensaje claro al Gobierno y otras autoridades: la ciencia se está rebelando ante una acción insuficiente.

La Policía Nacional retiró al grupo de participantes en la protesta en poco tiempo e identificó a una parte de ellos. A pesar de que no hubo detenciones in situ, se activó un protocolo de búsqueda y captura para 15 de las activistas, que fueron llamadas a comisaría meses después del acto, y luego tuvieron que prestar declaración en el Juzgado de Instrucción número 30 de Madrid (Plaza de Castilla).

En un principio la cosa parecía gravísima: la Policía acusó de haber detenido las actividades parlamentarias, lo cual apuntaba a una posible causa “antiterrorista” y que el caso hubiera acabado en la Audiencia Nacional. Finalmente no fue así. Fueron decayendo las acusaciones iniciales, como la de detener la actividad del Congreso o la resistencia a la autoridad, y quedó sólo en firme la acusación de daños al patrimonio histórico, por la que la Fiscalía de Madrid pide 21 meses de cárcel y una multa común de 3.300 euros. Estas 15 personas se hallan ahora a la espera de juicio oral: un caso más entre otros muchos que documentan la creciente erosión del derecho a la protesta democrática.

Entre los portadores de la pancarta, el poeta y cineasta Julio Mas Alcaraz
 


La represión policial de las protestas y acciones de desobediencia civil frente a la emergencia climática va en aumento, sumándose a otras formas de hostigamiento y violencia que sufren personas y colectivos comprometidos con la defensa de la vida en la Tierra. Violencia que en muchos casos, en el Sur global, desemboca en graves violaciones de los derechos humanos y en asesinatos.

El Consejo de Ministros de nuestro Gobierno aprobó el acuerdo de Declaración ante la Emergencia Climática y Ambiental en España en enero de 2020. Pero, pese a que la situación objetiva empeora cada vez más y las perspectivas de un planeta Tierra inhabitable (para seres como nosotros) empeoran, ni el Gobierno ni el Congreso ni otras instituciones están actuando de manera adecuada frente a esos peligros. La enorme desproporción entre la situación de emergencia y la ausencia de respuestas adecuadas lleva a acciones como la del 6-A de 2022 en la Plaza de las Cortes.

Hoy estamos aquí para apoyar a todas las activistas objeto de represión y para reclamar el cambio sistémico que nuestras sociedades necesitan para evitar que la Tierra se convierta en un infierno climático.


domingo, 31 de marzo de 2024

Una luz difícil


Una luz difícil, Tomás Gonzlález. Sexto Piso. 2023

 

 

 

 

No pensaba escribir este artículo, por falta de tiempo; pero al final se me impone la búscadora de nexos que hay en mí y no he podido más que rendirme al peso del entramado cultural que distingo en el libro. Esto no quiere decir que el autor se haya nutrido de las citas de las que voy a hablar, sino que yo gusto de enhebrar distintas lanas para tejer mis reseñas. En cualquier caso, los vínculos están ahí. Ya sea por pura casualidad o porque mi ojo crítico no pierde la ocasión de señalar los lugares de encuentro.

El protagonista de Una luz difícil es pintor. Alguien sujeto como todo el mundo a los vaivenes emocionales. Sin embargo, que sea un artista (plástico) cambia las cosas. Tras el accidente de tráfico de uno de sus hijos se avergüenza del reconocimiento mediático que recibe su obra. La felicidad viene descompesanda por la pena. Y no obstante, expone sus pinturas porque, al final, debe salvar el Arte. Al público que visita las galerías le trae sin cuidado que la estabilidad emocional del pintor ya no concuerde con su estado de ánimo después de la catástrofe. Y él acaba sobreponiéndose a sus trágicas circunstancias personales para promocionar una serie de cuadros de una etapa anterior con la que ya no se identifica, pero los expectadores. Y he aquí el artista. El que hace de tripas corazón. El ser humano que sufre, pero trata de ofrecer la belleza que sintió (en una etapa biográfica pretérita) a sus conciudadanos. El dinero de las ventas, además, le resulta indispensable para pagar las medicinas y tratamientos que su hijo necesita para sobrevivir con cierta dignidad.

El balance que de su vida hace David en la vejez, pese a la tristeza que le producen las desapariciones de dos de sus seres más queridos, es realmente positivo. Aquí veo yo una concomitancia con el mensaje que el filósofo Ludwig Wittgentein dejó a sus amigos poco antes de morir. La cita la recoge Juan Antonio González Iglesias. Por lo visto, el también lingüista pidió a la esposa de su médico que les comunicase al llegar: “Diles que mi vida ha sido maravillosa”. Quien haya leído Una luz difícil verá la analogía sin remedio.

La novela se centra en un par de aspectos que justifican, sobradamente, un juicio tan favorable. El primero es el Arte. Durante el proceso creativo se siente ilimitado. Eterno y, por supuesto, feliz. El otro es el Amor. Un amor inseparable de su faceta erótica. Quién no se siente un dios cuando posee a la persona amada, cuando la da placer y lo recibe. Y en estos puntos distingo un puente entre Tomás González y Jorge Riechmann. Escribe este último: “El amor/ la poesía / dan sentido a esta aventura ambigua / que llamamos vivir” (Rengo Wrongo). Pero, sobre todo, sentencia: “El amor carnal es sacramento, el gran arte es sacramento […] y no se me ocurre nada más que lo sea” (Conversaciones entre alquimistas). Pintores y poetas, fecundos en Eros y en proyectos artísticos, percibimos la divinidad cuando satisfacemos el deseo o cuando creamos. Dicho esto, añado, con permiso de Riechmann, que la amistad (valor epicúreo donde los haya) también puede ser sagrada. Así lo cree Mario Míguez: “La amistad verdadera […] es como el amor un sacramento” (El cazador). No en vano, serán los amigos quienes sostengan a David en sus últimos años, ya de viejo. Esta dulzura final inclina la balanza de la existencia a favor del resumen feliz. Pero, como adelantábamos, Eros y Arte ya habían inclinado la balanza de su lado.

El estado de conformidad con que David acoge los cambios en su vida (las muertes, la pérdida de visión…) es de signo estoico; la satisfacción de sus deseos naturales y necesarios (“Cuando tengo hambre, como; cuando tengo sed, bebo”, Pág. 146), así como la limitación de sus deseos son de origen epicúreo. Poco más se necesita para sentirse dichoso a una edad tan avanzada como la suya. Juan Gil-Albert, en el texto en prosa Autoretrato, haciendo balance de su existencia unas horas antes de cumplir los setenta, declaraba también con rotundidad: “Me siento feliz”.

 

            


miércoles, 27 de marzo de 2024

Un poema de Sabiduría de los límites

 


Dejo por aquí un poema de mi nuevo poemario Sabiduría de los límites. Línea de flotación (Universidad de Alcalá de Henares. 2023).

 

En breve, unas líneas sobre lo que pretendo con el libro y lo que pienso de él.

 

 

viernes, 22 de marzo de 2024

Fallamos el Hiperión




Ayer, 21 de marzo (Día Internacional de la Poesía), hicimos público el libro ganador del último Premio Hiperión: Oro en las grietas, escrito por Lorenzo Roal (1992).

Os dejo por aquí un enlace a El Cultural, suplemento del diario El Español, que ayer recogió la noticia:

https://www.elespanol.com/el-cultural/letras/20240321/lorenzo-roal-gana-premio-hiperion-obra-oro-grietas/841666090_0.html

Seguimos.



domingo, 3 de marzo de 2024

Un recuerdo de la presentación en Alcalá de Henares


 

             El pasado 27 de febrero presenté mi doble poemario, Sabiduría de los límites. Línea de flotación, en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Alcalá de Henares. Tuve la suerte de contar con la complicidad y el cariño de Javier Lostalé. Al otro lado de la mesa, Ángela Álvarez Sáez nos daba a conocer su nueva obra (Canción de cuna) de la mano de Verónica Aranda. Detrás de todos nosotros, la energía y el talento de Francisco José Martínez Morán, que hizo de entusiasta anfitrión. Gracias le doy, además, por pedirme un manuscrito en 2021 para De luz, piedra y espejo, la colección de poesía que dirige en la UAM.

             Seguimos.



sábado, 17 de febrero de 2024

27 años de carrera literaria

 


El pasado 12 de febrero hizo veintisiete años que publiqué mi primer poemario. En este tiempo he cosechado veintidós libros de diferentes géneros: poesía, novela, antologías, ediciones de clásicos, traducción, ensayo y álbum ilustrado. Pedro Salinas decía de Federico que era "muchipersona", por su versatilidad artística. De sí mismo escribía: "Yo no sé si soy proteico, polifacético, polígrafo [...], pero por ahí debo andarme". En fin, yo me identifico con ambos. Por aquí os dejo una foto de familia.

Seguimos.


viernes, 9 de febrero de 2024

En el Bulletin of Hispanic Studies


 


Si hace un mes anunciaba el artículo que el profesor Paul Cahill (Universidad de Pomona, California) publicaba sobre mi obra en la revista norteamericana Romance Quarterly, os comunico ahora que tengo la inmensa fortuna de que otro profesor y crítico, Juan Carlos Abril (Universidad de Granada) analiza, entre otros, mi poemario Ciudad sumergida en un ensayo publicado en el Bulletin of Hispanic Studies (año 2023. 100.8; páginas 839-859): "De la conciencia a la autoconciencia: el ecofeminismo como respuesta poética".


Con gratitud.


Seguimos


sábado, 3 de febrero de 2024

Foto de familia de mis poemarios

 


Diez son los libros de poemas que he publicado hasta entonces. Me refiero a poemarios para todos los públicos. Uno de ellos, Las noches de Ugglebo, aunque ganó un premio LIJ lo considero apto para los adultos. Sería el equivalente a Parque Jurásico en la carrera de Spielberg. Otro, cambio, ¡En marcha! sí lo dejo fuera de esta foto, en la medida en que se trata de un libro en verso para lectores de 4º-5º de Primaria.

Cuatro de estos poemarios los he publicado en Hiperión; otro en Pre-Textos; uno más en Libertarias/Prodhufi, en La garúa, en Aguadulce, en la Diputación de Granada y en la Universidad de Alcalá de Henares. 

Nueve han salido en España, y uno en Puerto Rico (no obstante, acaba de reeditarse ahora en nuestro país. Este es, precisamente, uno de los poemarios cuya publicación anunciaba ayer).

Con cuatro de ellos he ganado premios importantes: Hiperión, Internacional Miguel Hernández-Comunidad Valenciana, Arte Joven de la Comunidad de Madrid y Príncipe Preguntón.

Adelanto que tengo inéditos que vienen de camino.


jueves, 1 de febrero de 2024

Publico nuevo libro

 


Con una alegría inmensa os anuncio que publico un nuevo libro, en cuyo interior laten dos poemarios. Se titulan sabiduría de los límites y Línea de flotación. Los prologan Luis García Montero y Jamila Medina Ríos, respectivamente. El responsable de la nota de contracubierta es Jorge Riechmann.

Con gratitud a Francisco José Martínez Morán y al consejo editor de la colección de poesía de la Universidad de Alcalá de Henares.

Ya os contaré más cosas en cuanto cierre las fechas de las presentaciones. 

¡Estad atentos/as!



domingo, 21 de enero de 2024

Maratón poético internacional por Palestina

 



Ayer leí un par de poemas en el macrorrecital por Palestina que tuvo lugar, de modo simultáneo, en varios países del mundo. Participé en la sede de La Ferroviaria (Madrid), en el turno de 17:00-18:00. Yo cerré esa franja con la lectura del siguiente texto, de Mahmud Darwix (ni qué decir tiene que causé ciertos llantos entre el público y que a todos se nos instaló en el pecho un pétalo de esperanza):


Sobre esta tierra hay por qué vivir: los titubeos de abril, el olor del pan al amanecer, el amuleto que una mujer le da a un hombre, las obras de Esquilo, los comienzos del amor, la hierba sobre una piedra, madres en vilo por el hilo de una flauta, y el miedo de los invasores a los recuerdos. 


Sobre esta tierra hay por qué vivir: los últimos días de septiembre, una mujer que sale de los cuarenta como melocotón maduro, la hora del sol en la cárcel, nubes que semejan un tropel de criaturas, los vítores de un pueblo a quienes encaran risueños la muerte, y el miedo de los tiranos a las canciones. 


Sobre esta tierra hay por qué vivir: sobre esta tierra señora de la tierra, madre de los inicios y madre de los finales. Se llamaba Palestina. Se sigue llamando Palestina. Mi señora: yo tengo, porque tú eres mi señora, tengo por qué vivir. 



Poesía escogida (1966 -2005). trad. Luis Gómez García. Valencia, Pre-textos. 2008. 

sábado, 20 de enero de 2024

Pretextos para leer poesía

Con Sergio Suárez, Francisco José Martínez Morán, Manuel Borrás, Andrés García Cerdán, Javier Lostalé, María José Codes y Carmen Palomo.


 

En esta imagen encontraréis ocho pretextos para leer buena poesía. La foto la tomamos ayer en la librería Rafael Alberti. En en el centro, Manuel Borrás, nuestro infatigable editor.  



martes, 16 de enero de 2024

El canon y la luna

 


 

Desde luego, los esfuerzos por construir el canon lírico de nuestro país están salpicados de encumbramientos y olvidos que, con el transcurrir de los siglos, se han ido enmendando no sin el denodado esfuerzo de críticos y de profesores. Basta echar una mirada rápida a cartas, cancioneros y antologías para descubrir que poetas laureados en su tiempo han acabado chapoteando en el río Leteo, y lo contrario: que vates de los que ciertos compiladores y ensayistas no quisieron acordarse engrosan hoy los tomos de la Historia. Me viene a la cabeza, para empezar, la inmortal “Carta y proemio al condestable don Pedro de Portugal”. El marqués de Santillana, cegado por el esplendor de los poetas italianos, en su nómina de autores en lengua castellana tuvo el descuido de ignorar al pobre de Gonzalo de Berceo. Y qué les parece el caso del célebre Cancionero de Baena. Entre los poetas que el bueno de Juan Alfonso elevó al monte Parnaso se encuentra Gómez Pérez Patiño, cuyos dezires –visto el ostracismo al que ha sido relegado- dejan mucho que comentar; y sin embargo, se dejó en el tintero a un tal Íñigo López de Mendoza… Menos mal que lo rescató del infierno de los poetas defenestrados Hernando del Castillo, casi un siglo más tarde, en su Cancionero general. (Me temo que el karma se le había vuelto en contra.) Si pensamos en Luis de Góngora, vemos que su huella desaparece en el Siglo XVIII. Lo tuvieron que rescatar de la caverna profunda en donde llevaba oculto trescientos años unos veinteañeros que se levantaron contra la rutina y la vulgaridad allá por 1927… Pero, claro, estos jóvenes tuvieron que poner sus versos al servicio de la denuncia sociopolítica, por lo que sus voces fueron barridas del país como si fuesen polvo. Nadie se acordó de ellos durante cuarenta años. Ni una foto en la portada de un mísero periódico (sí algún poema en revistas que luego también se borraron del mapa). Y qué me dicen del caso siguiente. Ganas el Nobel de Literatura. En tu tierra, cuatro años después, se publica un volumen ambicioso: Veinte años de poesía española, y… despiste del antólogo, se le olvidó tu nombre. Juan Ramón debió de revolverse en su tumba. Por suerte, llegó la democracia y con ella, volvieron al canon los autores invisibilizados o bien por la censura o bien por motivos estéticos. Moraleja: poeta, sé paciente. Los olvidos y silencios de hoy no significan nada. ¡Sigue siendo posible la inmortalidad el día de mañana! 

 

 

 

domingo, 7 de enero de 2024

La revista Romance Quarterly (USA) me dedica un artículo


 

Si ya me resulta milagroso que alguien me lea en mi país, no digamos que lo haga un profesor de una universidad californiana: Pomona College. Pero he tenido la inmensa fortuna de que Paul Cahill se haya interesado por mi obra y me ha haya dedicado un extenso artículo, que se acaba de publicar en una importante revista literaria norteamericana: Romance Quarterly. El título del ensayo es: "Queer Futurity and Conflicted Feeling(s) in the Poetry of Ariadna G. García". El autor analiza mis poemarios Construyéndome en ti (1997), Napalm. Cortometraje poético (2001), La Guerra de Invierno (2013), Helio (2014) y Ciudad sumergida (2018). Muestro desde aquí mi más sincera gratitud al profesor Cahill por el tiempo dedicado a mis libros. Es un honor que ni nombre resuene en los Estados Unidos y se haya filtrado en las páginas de tan reputada revista de investigación; también lo es que me pongan en la estela de Luis Cernuda.


El artículo está alojado en la MLA (Modern Language Association). Podéis descargarlo aquí:


https://mla.hcommons.org/?get_group_doc=1003430/1577229688-PlacingQueerAffectinthePoetryofAriadnaGGarcaCahillPaul.docx


Y aquí tenéis un acceso directo a la revista:


https://www.tandfonline.com/journals/vroq20 


A falta de tres días para cumplir los 47, recibo este estudio como un auténtico regalo de cumpleaños.


viernes, 5 de enero de 2024

Perspectivismo literario


 

 

Apunta Demetrio Estébanez Calderón que la crítica literaria angloamericana acuña el término The point of view para referirse al ángulo, el punto de fuga, desde el que se sitúa la voz que enuncia para relatarnos una historia o transmitirnos una idea. Ortega y Gasset, por su parte, en su ensayo El tema de nuestro tiempo emplea la nomenclatura perspectiva para aludir a las condiciones individuales de percepción de la realidad, partiendo de las coordenadas yo-aquí-ahora. El filósofo, influido por la teoría de la relatividad, esboza un mosaico de verdades relativas, de cuya suma resultada la verdad completa. Aunque el concepto perspectivismo, por tanto, es de invención contemporánea, lo cierto es que su uso como técnica literaria se remonta a la Antigüedad. Pensemos en las Heroidas, de Ovidio, donde el poeta romano, a través de varias epístolas, cede la voz a las mujeres despechadas por sus amantes. Esta inversión de la perspectiva amorosa tradicional –de enfoque masculino– tendrá su eco en la voz de la poeta mexicana Juana Inés de la Cruz, quien –en sus famosos sonetos de casuística afectiva– dará la palabra a amadas y amantes para que justifiquen y expliquen tanto sus sentimientos como sus acciones. Otro, sin embargo, es el género literario donde la técnica del perspectivismo es consustancial: el diálogo. Originario de la literatura grecorromana (recordemos las obras de Platón y Cicerón), gozó de éxito en la Edad Media (bajo el formato de debate o disputa, caso del texto Razón de amor) y se convirtió en el vehículo, por excelencia, de difusión de ideas en el Renacimiento. Son muchos los diálogos de estructura polémica donde dos interlocutores enfrentan sus visiones del mundo a propósito de un tema determinado (Diálogo de las cosas ocurridas en Roma, de Alfonso de Valdés). Pero también los hay que presentan una conversación familiar entre varios personajes individualizados, donde cada uno aporta un punto de vista, así como muestra su desacuerdo y discute las opiniones de los demás (Diálogos familiares, de Juan de Pineda). Hablamos de obras de influencia erasmista que abordan cuestiones religiosas o morales. El perspectivismo literario, por otra parte, no sólo afecta al ideario de cada personaje, sino a su expresión lingüística. Cervantes fue un maestro en ambos casos, y prueba es El Quijote. En el siglo XVIII, esta técnica se desarrolla, fundamentalmente, en el teatro. Ahora bien, la obra que mejor representa la observación de la realidad desde distintas ópticas la firma José Cadalso: Cartas marruecas. La técnica del perspectivismo le sirve para varios propósitos: dar una apariencia de objetividad a su escrito, ofrecer una lectura amena, reflejar sus propias contradiciones, y permir al lector que escoja la verdad que más le cuadre con su propio criterio. La literatura del siglo XX no se entiende, como comentaba al principio, sin la huella de la teoría de la relatividad en los escritores. Desde el Lorca de La casa de Bernarda Alba (que enfrenta los principios de libertad y autoridad), al Gabriel García Márquez que desordena su Crónica de una muerte anunciada para relatarnos un crimen desde varios puntos de mira y con una cronología dislocada. No existen las verdades absolutas. Henry James, en el prólogo a Retrato de una dama, utilizaba las metáforas de la casa y sus ventanas para referirse a las perspectivas desde las que observar un tema.